Sara empezó a practicar snowboard a los cuatro años y enseguida impresionó con su excepcional talento. En quinto grado, ganó el Campeonato Nacional de Japón de la JSBA y se convirtió en la snowboarder profesional más joven de Japón, forjando así un impresionante palmarés desde muy joven.

En los últimos años, ha subido regularmente al podio en competiciones internacionales y tiene un objetivo claro: los Juegos Olímpicos de halfpipe. Con su dominio de las rotaciones verticales, aspira al título mundial y quiere consolidarse como la mejor rider de halfpipe del mundo.